Una noche en Babilonia


Hubo en aquella ciudad un rey del que hasta ahora nunca se habló. Respondía al nombre de Orduk, y fue el primero y, hasta donde sabemos, el único rey con ese nombre. Cuando nació, tal noticia circuló por todos los rincones del Oriente, pero el olvido es el brazo más poderoso del tiempo.
Aquel rey se convirtió en un erudito de los saberes humanos. No había libro, canción o simple saber que no conociera o no quisiera conocer.
Una noche subió a la torre más alta de su palacio y decidió quedarse allí a contemplar las estrellas, como creyendo que el silencio de la oscuridad iluminaría frente a él algunas verdades antes de dejarlo en un profundo sueño. Las constelaciones dibujaron su suerte.
Vio en ellas a la forma de un león alado mostrarse. Cuando Orduk escuchó rugir a la bestia, creyó que los muros de la urbe caerían, mas nada ocurrió. El rey interpretó que sólo él podía presenciar a tal criatura, pero no sabía si eso era de buen o mal augurio.
Bestia y monarca se contemplaron mutuamente. Orduk quería que ella se acercara. Pensó que toda su vida había esperado algo como lo que estaba viendo, algo que trascendiera los grandes pergaminos de los antiguos sabios. Aquella bestia acabó por posarse frente a él, pero era a Orduk a quien se le había permitido estar en su presencia.
Desconozco si Orduk y ella intercambiaron palabra alguna o si aquel soberano simplemente entendió lo que la bestia quería. El rey de Babilonia se subió al lomo de la criatura y así fue cómo conoció todo el mundo que le faltaba.
Y cuando volvió a su ciudad, su cuerpo fue atravesado por lo que nosotros llamamos la Historia: por él y frente a él, pasaron los incendios, las cenizas, los ejércitos y la reconstrucción. Pero ya no estaba. Ya no era. Se convirtió en astro, en todo lo que fue y lo que será, en toda la humanidad y en nadie.
El brazo más poderoso del tiempo nos legó las partes y los hilos, pero no el orden ni la certeza. Es aquella la alquimia del olvido: frutos de sus transmutaciones son la identidad y la memoria.

Brandon Barrios
Buenos Aires, Argentina

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