En el asilo de los recuerdos,
una palabra se tiznó susurrando;
evaporada en la medianía formaba luces artificiales,
cruzando mis parpados lacustres.
Señoriales entretejían historias encapsuladas,
que avivan multitudes, hoy imaginarias huellas silenciosas;
buscando acertijos y despojando,
la pena anidada en costras.
Ahora atrapado de la pandemia,
estacionado en una promesa inconclusa;
mantengo la esperanza de sobrevivir
a la lluvia constante de la incertidumbre, en la incertidumbre.
Manuel Mamani Lamas
Chile.
